PUNTO CIEGO...

Conduzco mi carro de noche por una ancha avenida de varios canales, no tengo luces. Me concentro y fijo mi atención en el camino lleno de obstáculos, intersecciones, señales para detenerme, desvíos. No me distraigo, tengo un punto de destino. Muy cerca, en ambos lados y detrás del carro que guió, mas automóviles viajan casi a la par, ellos tampoco pueden iluminar su camino. Vistos desde arriba conforman una gigantesca caravana que avanza en la oscuridad, cautelosa, ansiosa, sin colores distinguibles. Todos tiene la misma meta, no nos conocemos o reconocemos unos a otros. Avisos luminosos intentan desviarnos de nuestro destino, muchos se desvían engañados a calles cerradas. Obstáculos ocultos detienen a otros. Otra parte de nosotros no sabe realmente a donde se dirige y opta por renunciar abandonando la marcha. Pero la gran mayoría seguimos rodando hacia esa salida real, empecinados en alcanzarla, aun sin reconocernos, tratando de identificar a quien marcha a nuestro lado sin lograrlo. Esta en un punto ciego donde no podemos verlo.

En medio de esta crisis que se nos vino encima, inevitable, imposible de planificar, se creo un grupo que ahora es mayoría. Los que sabemos que la revolución fracasó. Miembros de cooperativas socialistas, profesores universitarios, empresarios de todos los niveles, madres del barrio, obreros de la CVG, tercerizados de PDVSA, refugiados en espera de vivienda, gremios culturales, partidos políticos, lideres vecinales, estudiantes alzados. Frentes distintos de una misma Venezuela, de una misma lucha. Todos protestando por lo mismo, contra lo mismo pero cada grupo por separado. Sin reconocerse, sin identificar que el que protesta en la otra cuadra esta de nuestro lado. Esta en ese punto ciego de nuestra conciencia donde no queremos verlo.

Entre tanto los estudiantes, los jóvenes están entrampados en una guerra urbana contra un enemigo que los supera en maldad, en capacidad de hacer daño, en ilegalidad, en desprecio por sus congéneres. Un enemigo escogido entre los jóvenes mas radicales, luego de purgar de sus filas a cualquier resto de simpatía por la causa opositora. Las muy escasas voces disidentes dentro de las FANB y PNB, son de efectivos retirados de funciones de comando. Las ordenes inconstitucionales son impartidas por esbirros claramente identificados y acatadas con gozo creciente mientras mas inhumanas sean. Desde la grada muchos corean ESTUDIANTES! ESTUDIANTES! pero son incapaces de bajar a llevar un vaso de agua. Con la misma fuerza gritan TRAIDOR! a quien no sale a tirar piedras, sin fijarse que ellos tampoco lo hacen. No puede verse en ese espejo, evita verse, dice estar frente a el. Pero esta en el punto ciego donde su mentira y comodidad le impide reflejarse.

El gobierno llama a un dialogo, un monologo consigo mismo. Con el sol a la espalda para que su cínica mueca no pueda ser percibida, pero al igual que los impuros espíritus su cuerpo físico no hace sombra. Al no tener una propia intenta cubrirse con la inmóvil penumbra de un Libertador petrificado de tanto horror, por la saña con la que actúan en su nombre contra los propios hijos de la patria. Ese mismo Libertador que en el momento mas terrible de la guerra de independencia, viéndose obligado a lanzar el DECRETO DE GUERRA A MUERTE, teniendo en cuenta que las tropas realistas no solo estaban conformadas por españoles, transformo lo que seria una amenaza de exterminio de los imperialistas en una declaración de amnistía. "Españoles y canarios, contad con la muerte aun siendo indiferentes, si no obráis activamente en obsequio de la libertad de América. Americanos, contad con la vida aun cuando seáis culpables". El corrupto y egoísta corazón de la revolución jamas tendrá la estatura de Bolívar. Su resentimiento supera mil a uno a cualquier vestigio de bondad. Mucho menos tiene el derecho de adueñarse de su legado. No puede reflejarse en sus ideales, es en si el punto ciego, una imagen borrosa de lo que dice ser pero no es.

La oposición, obligada a cumplir con su ingrato rol de negociador. Cuando el soberano pide coliseo, sangre, muerte. Obligada a parlamentar con quien no sabe escuchar, a entrar en salones llenos de enemigos, a su vez rodeados de enemigos. Heroica y clandestina tarea marcada por censura del sumario, para luego encontrar que el pueblo, su pueblo. Los que se hacían llamar sus seguidores son su peor enemigo. Son los que hoy los insultan, difaman, y agreden. Ante semejante falta de apoyo los jerarcas del régimen, sonríen y se burlan del dialogo en nuestras caras. Todas las decisiones para solventar el conflicto DEBEN SER TOMADAS POR EL GOBIERNO, La oposición solo aporta propuestas, que no tendrán fuerza sin nuestro apoyo. Nosotros pusimos a la oposición democrática en el punto ciego, los herimos de muerte acusándole de cómplices del despotismo, y los borramos de nuestra vista.

Por ultimo la razón por la que la crisis llego a todos. Ustedes los fervorosos seguidores de este "moribunda" revolución. Empeñados en no dar su brazo a torcer, incluso cuando el heredero del patíbulo en que se ha convertido nuestro país, llego a matar, a reprimir, a destruir el futuro de sus hijos. Incapaces de ver que su sufrimiento es el nuestro, que sus carencia son nuestras también, que su ser querido asesinado por lo que hoy viene a ser la misma violencia, sea criminal o política. Ese muchacho muerto nos duele a todos. Ustedes, pusieron a todo el país en el punto ciego de su campo visual, solo ven el abismo que se cierne delante de todos y cerrando los ojos siguen empujando con toda su fuerza un carro que ya no anda. Con un conductor tan ciego de vista, como de alma. El poder de detener esta barbarie, no esta en dialogo, no esta en barricadas, no esta en guarimbas, no esta en la guerra civil, no esta en los militares. Esta en ustedes que llevaron a los destructores de la nación al sitio donde están. Ustedes tienen el futuro de la patria en sus manos.